La Lenteja de la Armuña se caracteriza por su color verde claro, a menudo jaspeado, su fino tacto y su buen tamaño. Una vez cocinadas presentan un caldo claro, una piel fina casi inapreciable y una textura mantecosa que las hace inconfundibles.
Destacan por su elevado contenido en proteínas, las de mayor calidad de todos los tipos comerciales estudiados debido a sus aminoácidos esenciales; sus niveles de fibra, hierro y su contenido en calcio que supera en un 50% al de otras lentejas.
La zona de producción se reduce a la comarca salmantina de La Armuña, cuyos suelos y clima, junto con unas técnicas de cultivo tradicionales hacen de este cultivo un producto único que es envasado con la contraetiqueta numerada de la Indicación Geográfica Protegida “Lenteja de la Armuña” que certifica su calidad, origen y trazabilidad.
Un lujo al alcance de todos…...
La lenteja de Pardina de Tierra de Campos se caracteriza por un color pardo con puntos negros, cotiledones de color amarillo y un diámetro de 3.5 a 4.5 mm. Una vez cocinadas su grano es mantecoso, poco granuloso y harinoso.
Su riqueza proteica y su alto contenido en fibra la convierten en un plato necesario para una dieta sana y equilibrada.
La zona de producción se extiende por las provincias de León, Palencia, Valladolid y Zamora. Solo las lentejas que son envasadas con la contraetiqueta del Consejo Regulador son Lenteja Pardina de Tierra de Campos.
Una legumbre excelente